El ser humano está especializado en el reconocimiento de personas y especialmente de caras. Es por esa razón que somos especialmente buenos encontrando a alguien conocido entre una multitud o volvernos a acordar de alguien al que sólo hemos visto una vez y hace mucho tiempo....tu cara me suena de algo y no sé de qué.
En este post voy a tratar de algunos aspectos a tener en cuenta cuando incluimos personas en nuestra composición. El tema es prácticamente infinito y daría para mucho. En fotografía de moda o retrato, por ejemplo, existen miles de aspectos que podríamos comentar pero aquí vamos a tratar sólo los más generales.
De nuevo las "reglas" sugeridas más abajo son simplemente orientativas. De nuevo la norma de "rompe las normas" prevalece, pero como decimos siempre, vale la pena primero conocer algunas de las reglas establecidas para luego evaluar si vale la pena romperlas.
Tipos de encuadre
El tipo de encuadre elegido en el momento de hacer la toma va a determinar la
proporción de la persona que mostramos. Así distinguimos entre
planos generales dónde mostramos a toda la persona, pasando por
planos medios, dónde mostramos a partir de la cintura. Los
primeros planos muestran a partir de los hombros mientras que los
primerísimos primer plano (o
close up en inglés) se centran en la cara de nuestro sujeto.
También existe una clasificación en función
del ángulo con el que hacemos la toma. Así podemos distinguir entre
encuadres frontales dónde nos situamos de frente a nuestro sujeto, de
tres cuartos frontal o trasero, donde nos situamos de forma que vemos tanto la parte delantera como trasera de nuestro sujeto y finalmente
encuadres traseros en los que nos situamos a la espalda de nuestro sujeto.
Los ojos
Los ojos son el elemento más importante en un retrato. Como seres humanos somos extraordinariamente buenos analizando los ojos de las personas. Identificamos ojos de alegría, de tristeza, de preocupación, etc. Desde el punto de vista fotográfico, centramos nuestra mirada de espectador en los ojos de la persona fotografiada, y por tanto es el elemento que debemos destacar en nuestro retrato. Es más, podemos obviar las otras partes de la cara y seguir obteniendo un buen retrato.
Dónde dirigimos la mirada
Es muy común en nuestras composiciones que nuestro sujeto mire hacia un lado. Es norma habitual que encuadremos a nuestro sujeto de forma que dejemos más espacio hacia el lugar hacia dónde mira. Es decir, si nuestro sujeto mira hacia nuestra derecha, encuadraremos a nuestro sujeto a nuestra izquierda del cuadro, y de esta forma dejaremos más espacio en el lado derecho del encuadre.
Esta forma de encuadrar ayuda a explicar la historia que queremos reflejar. Es decir, si nuestro sujeto mira hacia un lado debemos enseñar más ese lado para guiar al espectador hacia lo que está mirando nuestro sujeto.
Articulaciones
Recordaré para siempre una clase de fotografía en el Centre Cívic Can Basté. A los alumnos nos tocó aquel día llevar fotos para un ejercicio de "mostrar el movimiento". Para esa ocasión elegí una foto que hice en un partido de futbol sala. La foto era la del momento del saque inicial. Consistía en los pies de un jugador que, al ser un movimiento rápido y junto con la baja velocidad de obturación de mi cámara, aparecieron movidos sugiriendo la sensación de movimiento de aquel momento inicial del partido
La profesora, Rebeca, miró la foto y tras pensarlo unos segundos, preguntó a todos los demás qué veían en esa foto. En concreto si veían algo extraño. Todo el mundo se lanzó a opinar sobre que si estaba un poco oscura (cierto) etc...Rebeca se estaba refiriendo a algo totalmente distinto y aprovechó para explicarnos algo que ya nunca podré olvidar.
Resulta que los pies del jugador estaban muy bien y había conseguido captar el movimiento a la perfección, pero el encuadre le cortaba las piernas justo por la altura de las rodillas. Pecado mortal! Creo que las palabras textuales fueron algo así como "están ahí como colgadas ¿no?"....
Cuando fotografiamos personas debemos procurar
NO cortar nuestro encuadre por las articulaciones. Si lo hacemos le damos un aspecto poco natural e incluso desagradable a la imagen. Esto aplica entonces a cuello, hombros, codos, muñecas, cadera, rodillas, tobillos...
Las Manos
Como comentaba al principio, los aspectos a tener en cuenta cuando fotografiamos personas es infinito. Un ejemplo de esto es pararnos a analizar la posición de las manos en un retrato. Hace poco leí un
artículo en Xatakafoto al respecto. Vale la pena echarle un vistazo porque se explica como superar el problema aquel de "no sé que hacer con mis manos" y se introduce el aspecto compositivo que las manos pueden tener en un retrato.
Conclusión
Somos grandes especialistas reconociendo personas y caras en particular y por tanto es uno de nuestros motivos favoritos y del que sin saberlo somos más expertos. Los tipos de encuadre nos ayudan a componer a nuestro sujeto y debemos tener en cuenta algunos aspectos como es el remarcar la importancia de los ojos, de la mirada e incluso de la posición de las manos. Debemos también evitar ciertos errores como encuadrar justo por las articulaciones.
Y tu, ¿conoces algún aspecto más a tener en cuenta cuando fotografiamos personas?